A IMPULSAR LA REFORMA EDUCATIVA
René Dávila
MÉXICO.-Impulsar una revolución educativa, mediante acuerdos, compromisos y acciones compartidas entre los gobiernos federal y estatales, los maestros y la sociedad; demandar que la educación pública se asuma como política de Estado y actualizar la capacitación del magisterio, fueron algunos de los temas analizados en los congresos extraordinarios que en las últimas semanas se desarrollaron en el país para renovar las dirigencias y los comités ejecutivos seccionales del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE).
En este intercambio de ideas que permeó en todos los actos sindicales, los docentes del país establecieron que el compromiso de la organización magisterial es firme y decidido para alcanzar la reforma educativa integral que el país necesita y destacaron la necesidad de lograr que la transformación de la educación pública sea considerada política de Estado, en la que concurran todos los actores involucrados en el tema.
Para fortalecer la escuela pública, articular y orientar los recursos, la estructura y su funcionamiento de cara a un nuevo modelo educativo, el SNTE reitera la importancia de tomar en cuenta, entre otros aspectos, la infraestructura, mobiliario y equipo de los planteles; incorporar nuevas tecnologías; contar con comunidades educativas integralmente seguras con autonomía de gestión y vincular los planteles con la sociedad.
Asimismo, es necesario tener escuelas de tiempo completo; modernizar la capacitación, actualización y superación profesional del magisterio; modificar el concepto de carrera magisterial; y fortalecer las acciones de salud para todos los estudiantes de educación básica.
El sindicato de maestros más importante de América Latina esta convencido de que la educación pública debe generar, en los niños y jóvenes del país, las habilidades y competencias que demanda la sociedad del conocimiento y la economía global.
A la fecha, más del 80 por ciento de las dirigencias y los comités ejecutivos seccionales del SNTE han sido renovados mediante eventos estatutarios que han contando con una amplia participación de maestros, que han debatido diversos temas sindicales y educativos con tolerancia y respeto a todas las ideas y corrientes que confluyen al interior de la organización. La pluralidad fue el denominador común en las reuniones.
En todos los congresos, los asambleístas examinaron y reflexionaron en diversas mesas de trabajo, no sólo su voto para renovar dirigencias, sino el rumbo que debe tomar la educación en el país, acorde con las conclusiones y resolutivos emanados del IV Congreso Nacional de Educación y el II Encuentro de Padres de Familia y Maestros.
Por otra parte, continúan los trabajos del congreso extraordinario de la Sección 7 en Chiapas, mientras que en la Sección 57 en Yucatán, el congreso extraordinario no se instaló en virtud de que no había garantías y, además, intereses ajenos al gremio impidieron el desarrollo del mismo.
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