
MÉXICO.-De acuerdo con el registro de las pacientes tratadas en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), con Terapia de Reemplazo Hormonal, que ha demostrado ser eficaz en la disminución de síntomas típicos por deficiencia hormonal y mejorar la calidad de vida de la mujer en etapa de menopausia, el 93.3 por ciento mostró recuperación integral de sus síntomas.
La menopausia oscila entre los 40 y 50 años, sin embargo, el 60 por ciento de las mujeres en este rango de edad padece los síntomas, sin embargo, no se atienden por falta de información o porque se considera que es una etapa normal de la vida.
La edad ideal para que la mujer inicie este tratamiento farmacológico es a partir de los 35 años, cuando comienzan a presentarse los cambios hormonales, es decir, el climaterio temprano, dijo la doctora María Antonia Basavilvazo Rodríguez, médico Gineco-obstetra e Investigadora Clínica del Hospital de Gineco Obstetricia No. 3 del Centro Médico Nacional “La Raza”.
El objetivo de esta terapia es equilibrar los niveles hormonales de la paciente que, de acuerdo con su historia clínica, refiere los síntomas característicos que ocasiona el agotamiento del ovario. Estos cambios pueden manifestarse como bochornos o síndrome vaso motor, trastornos en la menstruación o dejar de menstruar, alteraciones del aparato urogenital, resequedad vaginal, sangrados, depresión, disminución del apetito sexual o modificaciones en el resultado del papanicolau, donde se detecta la falta de estrógenos.
La terapia más utilizada es la de estrógenos solos o combinados, según el caso particular de cada mujer o también puede ser con progesterona, dependiendo del cuadro clínico y la edad para equilibrar y corregir los niveles hormonales afectados por la menopausia.
Los beneficios de este tratamiento que mejora la masa ósea, retrasa el desarrollo de osteoporosis, la mujer reduce la probabilidad de que se presenten eventos cardiovasculares, es decir, supera los riesgos que conlleva cualquier terapia alternativa, como cáncer de mama, padecimientos cardiovasculares y trombosis.
Los fármacos que se indican a las pacientes, contienen progestágenos, progesterona natural, testosterona, clormadinoma y tibolona, entre otros, y forman parte del cuadro básico del IMSS.
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