INDISPENSABLE FORTALECER LA PARTICIPACIÓN DE LA MUJER EN EL CUIDADO DEL MEDIO AMBIENTERené Dávila
MÉXICO.-De acuerdo con proyecciones de la población realizadas por el Consejo Nacional de Población (CONAPO), se estima que en el año 2030, el número de mujeres adultas en México será más del doble que los hombres, por lo que es indispensable fortalecer la participación de la mujer en la toma de decisiones encaminadas al cuidado del medio ambiente, aseguró la Asesora en Género del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, Itzá Castañeda Camey.
Al dictar la conferencia “Género y Medio Ambiente”, en el marco de la conmemoración del Día de la Mujer en el IPN, la especialista egresada del Centro Interdisciplinario de Investigaciones y Estudios sobre Medio Ambiente y Desarrollo (CIIEMAD) del IPN, consideró que la conservación de los recursos naturales es una oportunidad para la equidad.
La conservación de los recursos naturales requiere de las aportaciones de hombres y mujeres, porque como seres humanos y somos iguales, las características biológicas (reproductivas) es lo único que hace la diferencia; la desigualdad la ha generado el hombre como producto de la diferenciación social y cultural.
La tarea de involucrar a hombres y mujeres en la construcción de relaciones más equitativas y participativas en los procesos de conservación y desarrollo sustentable, debe estar basada en los referentes internacionales (convenciones como la de Río de Janeiro) y nacionales (Plan Nacional de Desarrollo 2007-2012 y Programa Nacional de Medio Ambiente y Recursos Naturales 2007-2012), que obligan al país a cumplir con los compromisos establecidos en ellos.
En pleno siglo XXI aún existen comunidades rurales en México en las que el género femenino socialmente está muy por debajo del masculino. Existen distinciones marcadas en la participación; por ejemplo, en las asambleas ejidales las mujeres se sientan hasta atrás y no hablan durante las reuniones porque son monolingües (sólo hablan su dialecto), no opinan por el simple hecho de ser mujeres o si lo hacen sus opiniones no son tomadas en cuenta.
La asesora de la ONU advirtió la necesidad de orientar los trabajos hacia la participación de las mujeres como administradoras de los recursos naturales y no sólo como consumidoras de los mismos, a fin de que pasen de ser recolectoras de frutos y leña a gestoras de los recursos naturales.
En México existen grandes retos y las Instituciones de Educación Superior como el Politécnico, tienen un papel muy importante que desempeñar mediante la generación de información e indicadores ambientales desagregados por género, así como en la preparación de recursos humanos conscientes de la necesidad de incluir a la mujer en el manejo de los recursos naturales, toda vez que el índice de los hogares que encabezan las mujeres es cada vez mayor.
La equidad social es un requisito para la conservación y el desarrollo sostenible, porque las mujeres y hombres se relacionan y utilizan el medio ambiente y sus recursos naturales en forma diferente y es necesario que haya un equilibrio, para que el manejo y gestión de los mismos se oriente cada vez más hacia la sustentabilidad.
El cambio climático es un problema muy serio que ya afecta a todo el mundo, por ello nuestro país requiere que se intensifiquen las acciones individuales y colectivas y que se incremente la vinculación de hombres y mujeres en torno al cuidado ambiental, a fin de que las repercusiones afecten lo menos posible a los recursos naturales, incluido el ser humano.
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