RECURSOS PARA ASEGURAR CALIDAD Y OFERTA EDUCATIVAS EN EDUCACIÓN SUPERIOR
René Dávila
MÉXICO.-En el presente año la Secretaría de Educación Pública (SEP) destinará casi 4 mil millones de pesos para ampliar la oferta educativa y asegurar la calidad en los diferentes subsistemas de educación superior del país, y de esta manera, avanzar en el cumplimiento de la meta del 30 por ciento en materia de cobertura, propuesta en el Programa Sectorial de Educación 2007-2012.
De acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Tecnología (UNESCO), para que un país pueda tener una inserción ventajosa en la economía del conocimiento, debe presentar una cobertura de al menos el 50 por ciento en educación superior.
De los recursos, 2 mil 475 millones estarán destinados al Fondo de Aportaciones Múltiples (FAM), 900 millones a las Universidades Públicas Estatales (UPES) y a las Universidades Públicas Estatales y de Apoyo Solidario (UPEAS), 550 a los Institutos Tecnológicos (ITs) estatales y federales y 50 millones para la Universidad Abierta y a Distancia (UAD).
Referente a los recursos destinados al FAM para 2008, éstos representan un incremento de 31.4 por ciento con respecto al año anterior, y se canalizarán a la participación federal y estatal canalizará estos recursos a proyectos de construcción, equipamiento y mantenimiento de la infraestructura física de espacios educativos.
Los recursos otorgados al FAM en 2008 superan en 692.6 millones de pesos a la mayor inversión registrada en la pasada administración -y que fue de mil 782.9 millones de pesos en 2006-, lo que representa un incremento de 38.9 por ciento.
En 2007 a través del FAM se contó con un presupuesto de mil 884 millones de pesos, del cual mil 330.4 millones se destinaron al Subsistema de Educación Superior Universitaria, cuyas principales acciones y resultados se reflejaron en la creación de dos Universidades Interculturales Bilingües (Michoacán y Guerrero) y de la Universidad de Oriente, en Yucatán, y la Universidad Nacional Aeronáutica, en Querétaro.
También, con recursos de este fondo extraordinario las UPES y UPEAS construyeron 543 aulas, 28 talleres, 198 laboratorios, 985 cubículos, 25 bibliotecas, 8 auditorios, 274 oficinas, 40 centros de cómputo, autoacceso a 70 salas de usos múltiples, 608 espacios diversos, además de la ampliación, remodelación y mantenimiento de varios espacios físicos, lo que en total representó 226 mil 630 metros cuadrados, entre otras acciones.
Con recursos del FAM se trabajó para generar infraestructura en 13 Institutos Tecnológicos federales, que permitiera atender el crecimiento de la matrícula y apoyar la acreditación y reconocimiento de los programas de licenciatura y posgrado. Los esfuerzos se centraron en 6 Unidades Académicas Departamentales; 3 laboratorios de Ingeniería Industrial; 2 laboratorios de Ingeniería Electrónica; equipamiento de los laboratorios de Ingeniería Industrial, y reforzamiento de columnas y techo del Edificio G del IT de Cd. Madero.
Las acciones que realizan los subsistemas de educación superior están encaminados al cumplimiento de la meta de 30 por ciento en materia de cobertura, propuesta por el presidente Felipe Calderón Hinojosa en el Programa Sectorial de Educación 2007-2012, lo cual plantea como prioridad aumentar la matrícula en 100 mil estudiantes cada año; crear nuevas instituciones y programas de educación superior; actualizar infraestructura y dar mayores apoyos económicos a las instituciones ya existentes, así como incrementar programas de buena calidad y aplicar criterios de innovación permanentes.
La cobertura que hoy se tiene en el nivel superior en México es de alrededor de 25 por ciento, y una perspectiva de largo plazo indica que para acercarse en el 2020 a los niveles observados en los países en desarrollo relativo semejante, sería necesario mantener este ritmo de crecimiento y adicionar a la tasa de cobertura actual al menos 0.8 puntos y deseablemente 1.3 puntos en promedio por año. En este escenario, se requiere de una inversión de 6 mil millones de pesos cada año para alcanzar 33 por ciento en materia de cobertura al 2012 y de 45 por ciento al 2020. En este sentido, se trabaja para involucrar a las instituciones públicas autónomas en el desarrollo de políticas que buscan mejorar y asegurar la calidad de la educación superior, y para ello recurre, entre otras herramientas institucionales, como el subsidio extraordinario que se otorga a través del FAM, que fue creado para apoyar el desarrollo de la infraestructura de los organismos públicos descentralizados del orden estatal y federal, e incluye recursos para proyectos de construcción, equipamiento y mantenimientos de la infraestructura física.
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