URGE DEMOCRATIZAR LA EDUCACIÓN Y LA ESCUELA
EN LATINOAMÉRICA: ELBA ESTHER GORDILLO
Rene Dávila
Santiago de Chile.- Frente a la exigencia de recuperar la centralidad de la educación en el desarrollo social, y la haga capaz de enfrentar las nuevas realidades y desafíos que tiene ante sí, la Maestra Elba Esther Gordillo, Presidenta del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) y de la Confederación de Educadores Americanos (CEA), destacó la urgente necesidad de emprender una reforma educativa.
En el marco del VIII Foro de Biarritz, que reunió durante dos días a líderes políticos de Latinoamérica y Europa, entre ex presidentes, parlamentarios y dirigentes sociales, la Maestra Elba Esther Gordillo impartió la conferencia magistral, “Reforma educativa, una garantía de cohesión social y responsabilidad democrática”.
En este Foro que, por primera vez se abrió a empresarios y sindicalistas, la Maestra Gordillo, única conferenciante magistral del evento en su calidad de Presidenta del SNTE y de la CEA, subrayó que “generar un nuevo modelo educativo que responda a las exigencias del siglo del conocimiento –el XXI- , debe ser el motor de una nueva revolución, capaz de transformar no sólo el ámbito escolar, sino el rumbo social y económico de las naciones”.
Ante un numeroso auditorio que congregó a más de 1,600 personalidades de los dos continentes, la Maestra Elba Esther Gordillo dijo que es inaplazable una reforma educativa permanente, que deje atrás el doble discurso que, por una parte, acepta la importancia de la educación como algo políticamente correcto y, por la otra, se muestra avaro a la hora de asignarle recursos suficientes para su funcionamiento.
Expuso que si se desea que la educación asuma su responsabilidad frente a la democracia, lo primero que se tiene que lograr es precisamente democratizar a la educación y a la escuela.
Explicó que mientras en nuestros países la educación urbana sea mejor a la rural, la privada mejor a la pública y la extranjera mejor a la nacional, no habrá democracia educativa y se carecerá de la vía para que la educación y la democracia beneficien verdaderamente a las sociedades.
Advirtió que “es necesario aprovechar el impulso transformador, ya que se corre el peligro de quedarnos atorados en modelos arcaicos. Lo que hagamos o dejemos de hacer en materia de educación para nuestros pueblos, será definitorio”.
Ante la comunidad internacional remarcó que es preciso que la educación recupere su papel motivador y movilizador, y que ello sólo podrá suceder si se le vuelve a asignar la conducción del proyecto nacional.
En sus reflexiones, la Maestra Elba Esther Gordillo delineó como una reforma educativa a emprender, la que reconozca el insustituible papel del maestro en el proceso de formación integral del educando, pero que además lo dote efectivamente de los medios para su actualización permanente y lo incorpore al conocimiento y uso de las nuevas tecnologías.
Finalmente demandó abrir las escuelas a toda hora y para todo el mundo, ya que “son nuestro mejor patrimonio y el recurso más cercano a los ciudadanos”.
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